Dicen que el rey Salomón, fascinado y estimulado por el perfume de la madera de cedro de la que, según cuenta la leyenda, estaban hechas las puertas de Babilonia, hizo construir su palacio con la misma esencia preciosa...
Inspirada por el aroma dulce y boscoso del cedro y complementada con sándalo, menta y ciprés, esta crema facial es un regalo para mi "rey Salomón", igual de fascinado por este aroma que el verdadero rey.
El aceite de jojoba nutre la piel sin dejar una sensación grasa, frena la deshidratación de las células, regula el sebo, calma y alivia la dermis, activa el metabolismo de la elastina y es apto para todo tipo de piel. El hidrolato de menta piperita es tonificante, antibacteriano, ilumina la piel, calma las irritaciones y los picores (incluyendo las irritaciones del afeitado).
Los aceites esenciales de cedro del Himalaya (astringente, antiinflamatorio y tónico), sándalo (relajante, tónico, antiinflamatorio, calmante) y ciprés (antiinflamatorio, calmante, tónico), actúan en sinergia para reequilibrar el sistema nervioso y aliviar las molestias e irritaciones de la piel.
Ingredientes
Aceite de jojoba, olivem 1000, agua mineral, hidrolato casero de menta piperita, aceites esenciales de ciprés, cedro y sándalo, óxido mineral azul, conservante natural.
Observaciones
El olor (según mi rey Salomón) es duradero y muy agradable, tiene un efecto positivo sobre el ánimo. El tacto es suave, sin engrasar, delicado en la piel, ideal como after shave y crema diaria.
Receta inspirada en: http://macosmetodeco.blogspot.com.es/2011/01/creme-visage-pour-homme-n4-menthe.html
2 burbujitas:
Como siempre, una receta de lujo. He disfrutado mucho leyéndola, Gracias por este momento tan maravilloso. Besitos...
Gracias a ti, Yohanka, siempre es un placer :) Besos.
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