Arena de baño espumosa del Himalaya
Para esta receta necesitamos retroceder 200 millones de años en la historia de este planeta.
En ese tiempo la Tierra estaba formada por un solo continente llamado Pangea y los enormes océanos, todavía no contaminados, ocupaban gran parte de él.
Imaginaos, por ejemplo, el Himalaya.
Lo que hoy es la cordillera más alta de la Tierra cubierta casi en su totalidad por agua salada.
Así que, antes de que Asia y la India se desgajaran de ese supercontinente, chocaran entre ellas y se formara levantándose del fondo del mar y saliendo a la superficie, la cordillera del Himalaya no existía.
Sólo era una profunda fosa oceánica llena de sedimentos marinos.
A los pies de la "montaña de la mente", en los estratos geológicos sedimentarios, hoy encontramos algunos vestigios del paso del océano por aquel lugar: una gran cantidad de sales fósiles puras, como la sal rosa del Himalaya, una encantadora sal cuyo color se debe a la cantidad de hierro que contiene, pero que también es extraordinariamente rica en magnesio, calcio y potasio.
Es la sal más pura y completa que existe, la más energética y la más curativa.
Activa el sistema circulatorio, regenera la piel, alivia ciertas afecciones como la psoriasis, limpia las impurezas, ayuda a combatir la fatiga, el estrés, el cansancio acumulado y como es una sal que retiene agua y no reseca, está recomendada también para pieles secas.
Por todo ello la hemos elegido como base de esta arena de baño espumosa.
Una arena perfumada de vainas de vainilla, rica en oligoelementos y minerales que produce una espuma suave y aromática. Un baño para relajar, revitalizar el cuerpo y cargar las pilas con la sal pura de hace millones de años.
ingredientes
Sal rosa del Himalaya (remineralizante, circulatoria, detoxificante, energizante).
Tensioactivo SCI (agente espumante).
Macerado de vainilla (suavizante, hidratante, nutritivo).
Mica satinada (optativo).

Fuentes: http://es.wikipedia.org/wiki/Himalaya, Laurence Dupaquier.
4 burbujitas:
Como siempre sorprendente la receta y la forma de explicarla!!! Me encanta leerte, tengo mucho que aprender de ti.
Un beso muy grande.
Gracias, Yohanka :)
¿Aprender de mí? Para nada, yo soy la eterna aprendiz...Un beso!
Debe ser una gozada, gracias por compartir.
Gracias Hebe, la verdad es que sí,una gozada para la piel...y el bolsillo ;)
Besos.
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