Sinceramente, a pesar de que el resultado final fue más o menos satisfactorio y el aceite de coco obtenido era una maravilla olfativa, el proceso fue demasiado arduo y desde entonces, no he dejado de darle vueltas y de buscar una forma menos tediosa, más práctica y mucho más sencilla de obtener este aceite.
Un método que pudiera compartir con vosotros casi con la total seguridad de que os animaríais a probarlo.
No sé a vosotros, pero a mí este aceite es el primero que se me acaba.
Et voilà, mi búsqueda ha dado sus frutos, cocos, concretamente, gracias a CatherineNC.
Os propongo un método para obtener el aceite en caliente, con un resultado espectacular.
Ya no tenéis excusa para no poneros en la piel de un verdadero artesano al menos por un día.
Os aseguro que es un método muy sencillo y que, traspasada esta línea, todo lo demás es pan comido. Con tanta autoestima, ya no habrá nada que no podáis hacer :)
Método en caliente
Lo primero que necesitamos es obtener la leche del coco, ya que el aceite se elabora a partir de ella.
Es importante elegir bien los cocos, a ser posible Bio, ya que esto también determinará la calidad del aceite final.
•Cómo obtener la leche de coco•
Para conseguir la leche del coco, extraemos el agua que se encuentra en el interior del coco sin romperlo, perforando las tres pequeñas aberturas que tiene en uno de sus lados.
Colamos el agua y la reservamos.
A continuación rompemos el coco, lo pelamos y rallamos la pulpa.
Exprimimos la pulpa una primera vez envolviéndola en una tela fina y limpia de algodón o utilizando un colador de tela (o similar) para extraer la mayor cantidad de leche posible.
Una vez exprimida la pulpa, le añadimos el agua del coco que habíamos reservado para volver a hidratarla, dejamos que la absorba durante unos minutos y la exprimimos por segunda vez.
La pulpa quedará totalmente deshidratada, lo que permitirá darle otros usos ya sea en cocina o en cosmética, ideal como exfoliante suave.
Éste es el resultado, una leche de coco cremosa lista para pasar a la siguiente fase.
•Cómo obtener el aceite de coco•
Una vez obtenida la leche, la colocamos a fuego suave en una cacerola sin dejar de remover. El calor no excesivo permitirá conservar intactas las propiedades del aceite.
Poco a poco, el calor hará que el agua se vaya evaporando y la leche espesará.
Y unos minutos después, las proteínas empezarán a separarse del aceite.
Ahora sólo hay que filtrar el aceite desfasado. El olor es una delicia...
Aquí lo tenéis: aceite de coco casero. Un aceite hecho con vuestras manos: para sentirse orgullosos!
Notas: a pesar de que es un procedimiento que lleva su tiempo, también es sencillo y asequible para todo el mundo.
El único inconveniente es quizá que las cantidades obtenidas de aceite no son demasiado elevadas: unos 25 gr de aceite por coco utilizado.
El proceso de calentamiento no es demasiado largo, depende de la cantidad de la leche empleada, en total unos 15 a 20 minutos.
Tanto la calidad como el aroma de este aceite casero son extraordinarios, pero más extraordinario es poder hacerlo en casa.
¿Qué más se puede pedir?

Fuentes: http://potionchaudron.canalblog.com




