Cremeros y cremeras, jaboneros, potingueros todos, retomamos con energía la sección 'Bricosmética' (últimamente abandonada un poco a su suerte) con los emulsionantes caseros, un tema que quedó pendiente el año pasado. Y lo hacemos concretamente con el estearato de sodio.
Hemos elegido este emulsionante por varios motivos, entre ellos porque resulta tremendamente sencillo de elaborar en casa y porque los que nos dedicamos a la cosmética natural, sea como afición o profesionalmente, solemos tener rondando por casa casi de forma permanente los ingredientes que necesitamos para realizarlo: ácido esteárico, glicerina, agua destilada y sosa cáustica (NaOH). Así que es perfecto para lanzarse.
Los estearatos son tensioactivos y emulsionantes muy polivalentes y útiles pero difíciles de encontrar en el mercado o "encontrables" a un precio bastante elevado. Sin embargo, ¿qué potinguero que se precie no tiene en casa sosa cáustica, glicerina o esteárico?
Vamos allá.
A grandes rasgos diremos que para obtener el estearato de sodio saponificaremos el ácido esteárico (ácido graso presente en gran número de aceites vegetales) con la sosa cáustica (hidróxido de sodio). La fórmula está pensada para que la cantidad de sosa utilizada sea inferior a la del ácido esteárico y asegurarnos de ese modo de que no quedará nada de ella al final del proceso. Así que, para que la reacción sea completa, hay que prepararlo con un poco de antelación y dejar "curar" la preparación durante varios días o semanas antes de usarla. Durante la reacción, no todo el ácido esteárico se transformará en estearato, siempre quedará un poco sin saponificar, de la misma forma que queda el sobreengrasado sin saponificar en los jabones de proceso en frío.
Usos
El resultado de la combinación de estos dos elementos (ácido esteárico y sosa) será un jabón alcalino, sí, un jabón, ni más ni menos, que puede utilizarse como emulsionante/co-emulsionante y que, combinado con ceras (como soja o carnauba) aporta a las emulsiones una textura espesa, como de crema batida muy gratificante.
Como los estearatos son emulsionantes pero también tensioactivos, el estearato de sodio resulta además de gran valor para elaborar jabones de afeitar, por ejemplo: produce una espuma cremosa y persistente. Y, según mi experiencia, funciona muy bien en champús sólidos y en general, en productos de baño enjuagables.
También, claro está, en bálsamos y todo tipo de emulsiones o en desodorantes sólidos (la marca Lush lo utiliza mucho en este tipo de productos).
Sus puntos más débiles quizás sean:
-que la textura obtenida en emulsiones resulta mucho más agradable si asociamos este emulsionante con otros más nutritivos sobre la piel, es decir, si lo usamos como co-emulsionante.
-por su composición, no se recomienda añadirle aditivos de tipo ácido a las preparaciones (alcohol bencílico, fruta en polvo, alantoína...) ya que puede provocar que la crema se desfase ligeramente.
Teniendo estos factores en cuenta, para los que ya domináis el proceso de saponificación en frío, elaborar este emulsionante en casa es pan comido, ya que es como hacer jabón :)
Emulsionante/tensioactivo 'Estearato de sodio'
**Siguiendo la fórmula de L' Herboriste:
28 gr ácido esteárico
20 gr glicerina
30 ml agua destilada
3,4 gr NaOH (sosa cáustica)
1 varilla de cristal preferentemente (este material no interviene en el proceso químico)
*En un recipiente colocar el ácido esteárico, la glicerina y 15 ml de agua destilada y poner al baño maría.

*Disolver la sosa cáustica (con todas las precauciones que ya conocéis de sobra) en los 15 ml de agua restante.
*Cuando el ácido esteárico se haya fundido, retirar del baño maría y remover bien con el fin de que el éste quede bien repartido.
*Verter poco a poco y suavemente la solución de sosa en la mezcla sin dejar de remover con la varilla de cristal y continuar removiendo hasta que se enfríe totalmente. La textura es bastante manejable, como una pasta tirando a seca.
*Dejar reposar durante varios días o semanas para asegurarse de que el proceso de saponificación se ha completado. Se puede ir controlando el pH hasta que sea el adecuado.
*Desmigajar al cabo de 1 ó 2 días, cuando la textura sea de polvo compacto y conservar en un recipiente cerrado.
Observaciones
Por regla general, el estearato de sodio por sí solo proporciona emulsiones muy ligeras que penetran rápidamente en la piel, por lo que, como comentaba más arriba, si la intención es conseguir una crema espesa y nutritiva, es interesante combinarlo con ceras duras como la de soja, carnaúba o abeja bio (al 50%).
Si además añadimos a la fórmula alguna manteca, entonces es perfecta para pieles secas que necesiten una hidratación y nutrición más profundas sin dejar una sensación grasa.
Si por el contrario, queremos algo más aéreo y ligero, digamos para el verano o para pieles normales a mixtas, será suficiente utilizarlo como único emulsionante.
Por último, si después del proceso de secado, el estearato de sodio casero le da a nuestras preparaciones un pH demasiado básico (no olvidéis comprobarlo), siempre podremos corregirlo y ajustarlo con un poco de ácido cítrico.
¿Os animáis?

Fuentes: http://l-herboriste.over-blog.fr/article-emulsifiant-38297336.html, http://www.100100plantes.com/article-le-stearate-de-sodium-maison-oui-on-peut--39978786.html